Hacer selfies, estos autorretratos casuales y halagadores, es algo muy divertido e imposible de evitar en París. La técnica ha mejorado notablemente desde que los inventores pusieron a nuestra disposición el maravilloso mundo de los selfiesticks, trípodes y temporizadores. Descubre en esta guía para hacer buenos selfies algunas ideas para que tus fotos queden dignas de un marco en medio del salón.
Escoge un buen fondo:
Haz que tu selfie hable de ti y de lo que estás viviendo.
Busca un fondo que te guste particularmente sin esconderlo detrás de tu rostro.
Evita que existan demasiados elementos que distraigan la mirada como gente o coches.
También prueba fotografiarte con muros, puertas y obras de street art que son ejemplos únicos de París. Activa el gps, así sabrás donde ha sido.
Evita tener mucho cielo detrás tuyo porque hará que tu cara salga oscura!
Cuida la luz:
Para que tu retrato quede bien, lo mejor es que evites un gran contraste entre las zonas de sol y de sombra porque hacen visible todas las pequeñas imperfecciones que nos caracterizan.
Si hace sol, ubícate bajo la sombra de árboles o edificios para una luz más uniforme.
En días nublados busca zonas con mucha luz natural.
Si estás en interiores, ponte cerca de las ventanas. La luz lateral suele dar mucho relieve.
Pose:
Coloca la cámara un poco por encima de tu cara para estilizar tu rostro, usando tu selfiestick o levantando tu brazo.
Coloca París en tus manos, sujetando de tus dedos la torre Eiffel, la pirámide del Louvre, etc.
Utiliza tu pose favorita y diviértete. Nadie mejor que tú para hablar de ti.
Buenas fotos en París!